No os podéis imaginar lo que hemos disfrutado con este taller multisensorial (bueno, no recuerdo que no lo hayamos pasado bien en ninguno, jeje, aunque unos han sido más divertidos que otros, claro).
Es súper sencillo hacerla y con ingredientes que todos tenemos en casa: harina, sal, aceite de girasol, agua y colorante alimenticio.
Sólo tenemos que mezclar bien las cantidades exactas de la receta que son: 2 tazas la harina, 1 taza de sal, 1 taza de agua, y por último 4 cucharadas de aceite de girasol. Mezclamos bien haciendo una masa. Dividimos la masa en pequeñas bolas y mezclamos el colorante alimenticio.
Y ya está, nuestra plastelina casera lista para usar.
Si queréis que os dure más tenéis que guardarla envuelta en papel transparente (el de los bocadillos) y además nosotras lo hemos metido en un recipiente hermético.
A parte de trabajar la psicomotricidad fina y el tacto (tenemos un par de alumnos que suelen rechazar tocar cosas nuevas) hemos trabajado los colores y con una de las alumnas las vocales.
Aquí tenéis el video de cómo lo hemos hecho 🙂
Espero que os haya gustado, hasta el próximo taller multisensorial!!!